En un sorprendente episodio para el ecosistema cripto, el protocolo de préstamos DeFi llamado Euler Finance se vio sacudido por un hackeo que resultó en el robo de casi USD 200 millones en criptoactivos.
Poco después, se conoció que el responsable del ataque había sido un hacker argentino de tan solo 19 años.
Efectivamente, el protocolo de préstamo descentralizado sufrió el impacto de un ataque flash-loan que ocasionó un perjuicio económico de 197 millones de dólares en ETH, USDC, BTC y DAI.
Sin embargo, lo que inicialmente parecía un robo despiadado dio un giro inesperado cuando el hacker envió un mensaje al equipo de la compañía, asegurando que no tenía intenciones de quedarse con los fondos y proponiendo llegar a un acuerdo.
Quién es el hacker argentino y qué hizo con la plata
Tras una extensa negociación, se reveló que el responsable del ataque era un joven argentino llamado Federico, conocido en Twitter como @fedejaimeok.
Aunque sus acciones pudieron haber llevado a un gran perjuicio económico, Federico se define como un hacker de sombrero blanco; es decir, alguien que utiliza sus habilidades para proteger sistemas informáticos.
El hacker aprendió a programar a los 12 años y vendió su primer software por USD 10.000 a los 14. Además, cuenta con una vasta experiencia en el mundo de las criptomonedas y la tecnología blockchain.
Según sus propias palabras, trabaja con estas tecnologías desde 2015 y ha fundado una empresa dedicada a brindar servicios y asistencia a plataformas de videojuegos.
Los motivos del hackeo
El argentino asegura que la toma de dinero fue accidental y que siempre tuvo la intención de devolver los fondos.
Durante las tres semanas que conservó el "botín", Federico transfirió aproximadamente 200.000 dólares a un usuario que afirmaba haber perdido todos sus ahorros.
Este incidente pone de manifiesto tanto los desafíos de seguridad que enfrenta el mundo de las criptomonedas como la capacidad de los hackers para utilizar sus habilidades en beneficio de la comunidad.
Por último, la historia de Federico es un recordatorio de que el mundo de la tecnología está lleno de sorpresas y que el factor humano puede desempeñar un papel crucial en eventos tan trascendentales como este.
