Nadia (se modificó su nombre para proteger su identidad) tiene 13 años y usa Whatsapp como la mayoría de los chicos de su edad: habla en privado con sus amistades y también es parte de distintos grupos con otros compañeros. Un domingo se dio cuenta de que al intentar abrir la aplicación no obtuvo respuesta.
Pidió ayuda a su madre y cuando intentaron volver a configurar la app con el número de teléfono de Nadia, se dieron cuenta de que había perdido acceso a la cuenta y otra persona le había robado su número y sus contactos.
A diferencia de otros casos en los que hay delincuentes detrás en busca de engañar a los conocidos de la víctima para sacarles plata, en este caso había un acosador esperando tener acceso a la agenda de una menor.
Así acosaba a las menores
Tras lograr el acceso a la cuenta de Nadia, el acosador rápidamente cambió la foto de perfil por la de un chico y empezó a hablarle a sus amigas, relató su mamá. Las nenas, sorprendidas, dieron aviso a sus padres y pudieron poner en alerta a la familia de Nadia.
Sin embargo, el acoso continuó: como Nadia estaba en distintos grupos, se metió en cada uno de ellos para hacerse administrador y evitar así ser bloqueado o borrado por los integrantes de cada grupo de Whatsapp. Todas maniobras que indican que ya había hecho esto antes.
Al día siguiente intensificó su apuesta y pasó de hablarle a las amigas a directamente enviarles videos y fotos de contenido sexual. Cuando las menores comenzaron a bloquearlo, el sujeto cambió de número de teléfono y les siguió hablando desde esa nueva cuenta.
Las nenas ya no quieren usar el teléfono
Los padres contaron que ahora las menores viven con miedo de volver a recibir mensajes como los del acosador. La única manera de deshacerse de los mensajes es cambiando el número y esperar que algo así no vuelva a suceder, aunque cada vez hay más casos y los chicos son el blanco por la poca atención que prestan a la seguridad de sus aplicaciones.
Qué hacer ante el acoso por Whatsapp
Cuando las víctimas son menores la ley tiene una protección más amplia, por lo que será posible denunciar al acosador por, al menos, dos delitos tipificados en el código penal. El primero se enmarca en el artículo 128 y es por suministrar material pornográfico a menores de 14 años. El segundo es por el acceso ilegítimo a una comunicación electrónica, que se encuentra en el art. 153 de Código Penal.
La denuncia se debe realizar en la fiscalía más cercana y en este mapa del Gobierno de la Nación podrás encontrar cuál es la que corresponde a tu domicilio: https://www.mpf.gob.ar/mapa-fiscalias/
Por su parte, la ciudad de Buenos Aires cuenta además con una fiscalía específica para delitos informáticos y la denuncia puede hacerse a través de internet en https://mpfciudad.gob.ar/denuncias
