Recientemente, Jimena Barón se vio envuelta en una polémica que rápidamente se viralizó en las redes sociales. La cantante y actriz fue acusada de dejar una propina insuficiente en una reconocida pizzería de la Avenida Corrientes, lo que generó una ola de críticas y comentarios negativos hacia ella. La situación se desató cuando la influencer Pochi de Gossipeame compartió en su cuenta de Instagram una imagen de Barón y su novio, Matías Palleiro, junto a un billete de 10 pesos que, según se afirmaba, era la propina que habían dejado.
La noticia causó un gran revuelo, y muchos usuarios de las redes sociales no tardaron en expresar su indignación. Sin embargo, Jimena Barón no se quedó callada y decidió responder a las acusaciones a través de sus propias redes sociales. En su cuenta de Instagram, Barón aclaró que la propina dejada fue de 6.700 pesos, y que el billete de 10 pesos que se veía en la imagen era un billete antiguo que su hermano había encontrado y dejado en la mesa sin ninguna intención de que fuera parte de la propina.
“Reina, dejamos 6.700 pesos… ¡como corresponde!”, escribió Barón en una de sus historias de Instagram, visiblemente molesta por la situación. Además, explicó que su hermano había encontrado el billete de 10 pesos mientras sacaba dinero y lo dejó en la mesa porque ya no tenía valor. “Gracias igual por tratar de escracharnos. Increíble tener que estar aclarando estas cosas”, añadió la cantante, mostrando su frustración por tener que defenderse de lo que consideraba una acusación infundada.
La respuesta de Barón no solo buscaba aclarar la situación, sino también poner en evidencia lo absurdo de la acusación. En sus publicaciones, la artista expresó su incredulidad ante la necesidad de tener que explicar detalles tan triviales de su vida personal y defendió su derecho a disfrutar de una salida sin ser juzgada por ello. “Es increíble que tengamos que estar aclarando estas cosas. De paso, los curiosos que están al dope, les escriben y averiguan cuánta propina dejamos”, sentenció Barón, dejando claro su descontento con la situación.
La situación también abrió un debate más amplio sobre el escrutinio público al que están sometidas las figuras públicas y cómo las redes sociales pueden amplificar situaciones que, en otros contextos, pasarían desapercibidas. Muchos seguidores de Barón salieron en su defensa, argumentando que la cantidad de propina dejada es una decisión personal y que no debería ser motivo de juicio público.