Estefanía Pasquini, la nutricionista y esposa del reconocido doctor Alberto Cormillot, ha compartido a través de las redes sociales que está atravesando una semana particularmente difícil. Su esposo sufrió un accidente doméstico que resultó en la fractura de tres costillas y su posterior internación.
Además, su hijo Emilio, de dos años, se ha enfermado, lo que añade una capa adicional de preocupación y cuidado para la nutricionista.
En medio de estos desafíos personales, Estefanía continúa con su compromiso profesional, asistiendo a su trabajo y manteniendo su presencia en los medios. Esta situación resalta la fortaleza y resiliencia que caracterizan a muchas mujeres que equilibran las responsabilidades familiares con las demandas de sus carreras.
La enfermedad de Emilio, descrita por Estefanía como una alergia típica por el descenso de la temperatura.
La situación se complica aún más con la ausencia de Cormillot, quien se encuentra recuperándose en el Sanatorio Finochietto. Estefanía ha expresado su tranquilidad frente a la hospitalización de su esposo, enfatizando que, a pesar del accidente, él no está enfermo y que han pasado por situaciones más difíciles en el pasado.
La capacidad de Estefanía para manejar estas circunstancias adversas es admirable. A través de sus redes sociales, ha mostrado una imagen honesta y relatable de la maternidad y la vida familiar, compartiendo tanto los momentos tiernos como los desafíos que enfrenta. Su experiencia subraya la realidad de muchas familias que deben lidiar con imprevistos y cómo la fuerza y el apoyo mutuo son fundamentales para superarlos.
La comunidad en línea ha respondido con mensajes de apoyo y solidaridad hacia Estefanía y su familia. La empatía y el cariño que recibe son un reflejo de la conexión que ha forjado con su público, quienes valoran su sinceridad y su capacidad para inspirar a otros incluso en momentos de dificultad.
