Alberto Cormillot volvió a encontrar el amor más puro y noble cuando su vida se cruzó con la de Estefanía Pasquini. Juntos, han forjado una relación especial que ha perdurado a lo largo de cinco años de matrimonio y muchos más desde que se conocieron, hace casi dos décadas. A pesar de los prejuicios que enfrentaron, han formado una hermosa familia y tienen un gran orgullo: su hijo Emilio, quien cumplió tres años en septiembre de este año.
En este vínculo tan fuerte e importante, Estefanía considera a Alberto su gran confidente. La llegada de Emilio impactó profundamente en Alberto, quien hasta entonces no sentía la diferencia de edad de 48 años que existe entre ellos. La vitalidad de Cormillot es sorprendente, incluso para su propia esposa.
"Si algo tiene Alberto es que le cuento cosas que ni mis amigas saben... esos secretos que decís… (suspira). Porque es una persona que no juzga, que tiene la mente muy abierta, entonces, si le cuento de todo, ¿cómo no le voy a contar que tengo este mambo con él? Y le parecía totalmente lógico", confesó Pasquini.
Atravesando un gran momento de pareja, Estefanía recordó unas recientes vacaciones en Disney, donde vivieron una situación particular: "Hoy en día me dice que recién empieza a sentir la diferencia de edad que tenemos desde que nació Emilio. Ahí nos empezaron a surgir miedos que antes no teníamos".
"Siempre cuento que cuando comenzamos a salir y durante unas vacaciones en Disney, a mí me daba vergüenza decirle que estaba cansada. Pensaba: 'Si él no me dice que está cansado, ¿cómo le voy a decir yo que mañana durmamos un rato más y no empecemos tan temprano?'", reveló Pasquini en una entrevista con Clarín.
Enamorada como el primer día, Pasquini ama y admira al hombre que tiene a su lado, no solo por su profesionalismo, sino sobre todo por lo buen padre que es y la forma en que vive su vida diariamente. "Tiene una energía impresionante, así que en su mente no había ningún problema", concluyó.
