Flor Vigna, la talentosa actriz y cantante argentina, ha sido noticia recientemente por sus revelaciones sobre las infidelidades de su ex pareja, Luciano Castro. En una entrevista con el programa "Los Ángeles de la Mañana" (LAM), Flor compartió sus reflexiones y aprendizajes tras este doloroso episodio de su vida. A través de sus palabras, no solo mostró su vulnerabilidad, sino también su fortaleza y capacidad de crecimiento personal.
La relación entre Flor Vigna y Luciano Castro fue una de las más comentadas en el mundo del espectáculo argentino. Sin embargo, la pareja decidió poner fin a su relación a principios de 2024, y poco después, Flor confirmó que una de las razones de la ruptura fueron las infidelidades de Castro con la actriz Griselda Siciliani. Este descubrimiento fue un golpe duro para Flor, quien había depositado mucha confianza y amor en su relación con Luciano.
En su entrevista con LAM, Flor habló abiertamente sobre cómo enfrentó esta situación y qué lecciones aprendió. "Sé que el amor tiene esos capítulos y duelen. A veces me pasa que estoy saliendo de un lugar y me hacen una nota. Ahí habla más mi dolor que cuando uno ya sanó e hizo todo ese proceso. Uno no se puede escapar de eso", confesó Flor. Estas palabras reflejan la honestidad con la que la actriz ha abordado su proceso de sanación, reconociendo que el dolor es una parte inevitable del amor y las relaciones.
Uno de los aspectos más destacados de su reflexión fue cómo utilizó el dolor como una oportunidad para crecer. "Después depende de uno qué haces con ese dolor. Ahora voy entendiendo que cada uno tiene sus tiempos. Justo en un programa hablaba de los padres y su forma de ser, y yo ahora estoy entendiendo a mi papá, sus tiempos y eso", explicó Flor. Esta declaración muestra su capacidad para encontrar sentido y aprendizaje en medio de la adversidad, una cualidad que muchos de sus seguidores han admirado.
Flor también mencionó que este difícil episodio la llevó a refugiarse en la música y la composición. "Me refugié mucho en aprender a componer. Quiero aprender a saber qué siento y componer letras desde ese lugar", afirmó. La música ha sido una vía de escape y una forma de canalizar sus emociones, permitiéndole transformar su dolor en arte. Este proceso creativo no solo le ha brindado consuelo, sino que también ha enriquecido su carrera artística.
Además, Flor destacó la importancia de la inteligencia emocional en su proceso de sanación. "Sé que si me enfoco en mi inteligencia emocional, lo puedo hacer catarsis a través del arte. Sé que todo sí o sí me va a hacer crecer", expresó. Esta perspectiva refleja una madurez emocional que ha desarrollado a lo largo de su experiencia, y que le ha permitido enfrentar los desafíos con una actitud resiliente y positiva.
