Jorge Lanata, uno de los periodistas más reconocidos de Argentina, se encuentra atravesando un momento crítico en su estado de salud. Desde el 14 de junio, Lanata está internado en el Hospital Italiano de Buenos Aires, y las noticias recientes no son alentadoras. La situación es descrita como “muy difícil” por sus allegados y médicos, lo que ha generado una gran preocupación entre sus seguidores y colegas.
Lanata, de 63 años, ingresó al hospital inicialmente para un chequeo médico de rutina, pero su condición se complicó rápidamente. Según informes, sufrió una descompensación que llevó a los médicos a mantenerlo en observación. Desde entonces, su estado ha empeorado, y actualmente está intubado y conectado a varias máquinas para mantenerlo con vida.
El periodista Ángel de Brito, en su programa “LAM” (América TV), ha sido una de las fuentes principales de información sobre la salud de Lanata. De Brito ha señalado que Lanata está enfrentando una situación extremadamente delicada, con una infección que complica aún más su cuadro clínico. “Las noticias no son buenas, voy a ser bastante claro. El Hospital Italiano está por emitir un comunicado porque la situación es muy delicada”, comentó de Brito.
La situación de Lanata es particularmente complicada debido a su historial médico. El periodista ha enfrentado varios problemas de salud en el pasado, incluyendo diabetes, afecciones cardíacas y un trasplante de riñón. Estos antecedentes hacen que cualquier complicación adicional sea aún más peligrosa para su bienestar.
Marina Calabró, ex compañera de Lanata en el programa radial “Lanata sin filtro” (Radio Mitre), también ha hablado sobre el estado de salud de su colega. Calabró ha mantenido contacto con Elba Marcovecchio, esposa del periodista, quien está a cargo de su cuidado en este momento crítico. “Estoy en contacto con Elbita, a mí no me gusta invadirla, no me gusta preguntarle el minuto a minuto porque además son muy herméticos y me parece bien que cuiden esa privacidad de Jorge”, explicó Calabró.
La familia de Lanata enfrenta decisiones difíciles en este momento. Según de Brito, en situaciones como esta, son los familiares quienes deben decidir si continuar con el tratamiento médico o no. “Es bastante complicado porque no decide el paciente, tiene que decidir los familiares, en este caso Elba. En un momento es el familiar el que tiene que tomar la decisión. ‘¿Seguimos con el tratamiento médico o es hasta acá?'”, comentó de Brito.