Siempre quedarán emparentadas, entrelazadas de por vida, porque la trama íntima que compartieron continuará implantada en el inconsciente colectivo. Wanda Nara y la China Suárez poseen un encadenamiento, que se activó con la infidelidad de Mauro Icardi.
A raíz de aquel escándalo, que se configuró bajo la denominación del WandaGate, las dos famosas siguen enganchadas y cada tanto se lanzan algunos palitos por las redes sociales, a pesar del nuevo escenario, con la reconciliación de la de MasterChef con su esposo y el noviazgo que experimentó la actriz con Rusherking.
En los últimos días, la esposa de Icardi saltó a su lugar favorito en el mundo, Instagram, para armar un posteo que todo el mundo interpretó como una copia a María Eugenia. ¿Qué hizo? Se sacó una foto, pero una muy particular, con un look específico.
Se trataba de un peinado que suele utilizar Suárez, además de una postura en el lenguaje del rostro y sobre todo en el formato de las pestañas. "¡Los lunes me cuestan, nos vemos esta noche en Masterchef. Van a conocer lo bien que como en casa", escribió Wanda.
Merced a esa postal, a todos los condimentos de su pose, al peinado de las cejas, se instaló la idea de que se trataba de una copia a la China, por eso se aglutinaron comentarios en las plataformas digitales del tenor de: "La Wanda China Suárez no existe".
Atenta a todo el ruido mediático, a la repercusión, María Eugenia salió al campo público para hacer su maniobra, para generar su jugada y fiel a su estilo se expresó pero de un modo singular, sin realizar referencias directas a Wanda, pero con una claridad en la destinataria de su misiva.
En una storie, la China se filmó de frente, con una expresividad de ironía en su cara y puso de fondo una canción que contiene un metamensaje: "Hay un par que tienen ganas de tener mi cara, pero me pagan por esto sino juro que se las prestaba".
