El periodista Jorge Lanata falleció este lunes luego de una larga internación en el Hospital Italiano y varias complicaciones en su cuadro clínico a lo largo de más de seis meses. El célebre conductor radial y televisivo tenía 64 años.
Lanata pasó los últimos días en la terapia intensiva del hospital ubicado en el barrio de Almagro. Y si bien su entorno mantenía las esperanzas de un posible traslado a un centro de rehabilitación, distintas afecciones fueron alejando esa posibilidad. “La terapia intensiva es un día a día”, explicó Elba Marcovecchio luego de Navidad, cuando le consultaron por la evolución de su marido.
Según el último parte médico oficial, que se dio a conocer el viernes 6, Lanata en ese momento se encontraba “vigil, afebril y en ventilación mecánica durante la noche”. El parte agregaba, además, que estaba hemodinámicamente estable y no requería drogas vasoactivas. Después de que ese documento vio la luz, no se volvió a emitir un parte desde el centro médico, pero fue principalmente su hija mayor, Bárbara, quien se ocupó de dar a conocer las novedades a la prensa.
La internación de Lanata
Lanata fue internado el 14 de junio, cuando llegó al Hospital Italiano con el objetivo de someterse a un estudio de rutina. En medio del procedimiento, sufrió un paro cardíaco y fue trasladado a la terapia intensiva, donde estuvo los siguientes tres meses, hasta que fue derivado al centro de rehabilitación Santa Catalina, en el barrio porteño de San Cristóbal.
Pero Lanata volvió al Hospital Italiano pocos días después, en septiembre, cuando sufrió una neumonía y un cuadro febril, siempre con recuperaciones paulatinas. Sin embargo, pocos días después su cuadro empeoró drásticamente y debió ingresar cuatro veces al quirófano como consecuencia de una isquemia intestinal: le sacaron 70 centímetros del órgano y recién el miércoles 16 de octubre los profesionales del centro médico pudieron volver a unir su intestino. Desde entonces, si bien fue mostrando una evolución en su cuadro, por diferentes situaciones, no lograron trasladarlo nuevamente al centro de rehabilitación.