Renée Cormillot, la hija mayor del reconocido médico nutricionista Alberto Cormillot, ha generado un gran revuelo con sus recientes declaraciones sobre Estefanía Pasquini, la esposa de su padre. En una entrevista, Renée no dudó en expresar su descontento y preocupación por la relación entre su padre y Pasquini, afirmando que "lo está matando a mi papá en vida".
El conflicto entre Renée y Estefanía no es nuevo, pero ha alcanzado un punto álgido en las últimas semanas. La hija del médico ha sido muy vocal sobre su descontento con la forma en que Pasquini maneja la situación familiar, especialmente en lo que respecta a la salud de su padre. Según la hermana de Adrián, se enteró de la última internación de su padre a través de los medios de comunicación, lo que la dejó profundamente molesta y preocupada. Esta falta de comunicación directa ha sido una de las principales fuentes de tensión entre ellas.
Renée ha acusado a Estefanía de estar más preocupada por la herencia y los bienes materiales que por el bienestar de su padre. En una entrevista, comentó que le aterra escuchar a Pasquini hablar constantemente sobre la herencia, como si estuviera esperando que su padre falleciera. Esta obsesión por el dinero y los bienes ha sido un punto de fricción constante, y Renée no ha dudado en expresar su indignación al respecto.
Además, ha señalado que la relación entre ella y Pasquini nunca ha sido buena. Desde el inicio, ha habido una serie de diferencias irreconciliables que han dificultado cualquier tipo de entendimiento. Renée ha descrito a Pasquini como una persona mediática y millennial, lo que contrasta con la naturaleza reservada y privada de la familia Cormillot. Esta diferencia de estilos de vida y valores ha exacerbado las tensiones entre ellas.
La situación se ha complicado aún más con la llegada de Emilio, el hijo de Alberto Cormillot y Estefanía Pasquini. Renée ha admitido que no tiene una relación cercana con su hermanito debido a las tensiones familiares. Esta falta de conexión con Emilio ha sido una fuente adicional de dolor para Renée, quien siente que la dinámica familiar ha cambiado drásticamente desde la llegada de Pasquini.
A pesar de las tensiones, la primogénita del médico ha dejado claro que su principal preocupación es el bienestar de su padre. Ha expresado su deseo de que Alberto Cormillot reciba el cuidado y la atención que necesita, sin que las disputas familiares interfieran en su salud y felicidad. Sin embargo, la falta de comunicación y las diferencias irreconciliables con Pasquini han hecho que esta situación sea extremadamente difícil de manejar.