Desde temprana edad, Mónica Ayos mostró un gran interés por las artes, influenciada por su familia de artistas; sus padres eran bailarines estables de tango de las orquestas de Mariano Mores y Osvaldo Pugliese. A los 11 años, dio sus primeros pasos en la actuación y el baile, participando en programas de televisión y bailando tango junto a su padre.
Su carrera profesional despegó en la década de 1990, cuando comenzó a formar parte de diversas producciones televisivas y teatrales. Mónica Ayos se destacó en el teatro de revistas y fue reconocida por su talento actoral en telenovelas.
En el plano personal, la actriz ha compartido más de dos décadas de su vida con el actor Diego Olivera, con quien tiene una hija, Victoria. Su historia de amor comenzó de manera insólita, ya que ambos se conocían desde niños sin darse cuenta, debido a que sus padres trabajaban juntos en el ámbito artístico.
Juntos han formado una hermosa familia y han mantenido una relación sólida a lo largo de los años. Federico, el hijo mayor de Mónica Ayos, ha seguido los pasos de su madre en el mundo del espectáculo. Nacido el 22 de mayo de 1992, Federico ha desarrollado una exitosa carrera como actor y modelo en México.
El Joven participado en producciones televisivas como "La Candidata", "Te acuerdas de mí" y "Mi marido tiene familia", y ha logrado reconocimiento internacional gracias a su trabajo en la serie de Netflix "El Dragón" y en "Médicos, línea de vida" de Las Estrellas TV.
La vida de Federico no ha estado exenta de desafíos. Nació de una relación anterior de Mónica Ayos, marcada por la violencia de género, y su padre biológico se suicidó cuando él tenía solo cuatro años. A pesar de estos difíciles comienzos, Fede ha encontrado en la actuación y en su familia adoptiva un refugio y una fuente de inspiración.