Benjamín Vicuña, el reconocido actor chileno, ha compartido recientemente detalles sobre el difícil momento que está atravesando con su hijo mayor, Bautista, fruto de su relación con la modelo y conductora argentina Carolina “Pampita” Ardohain. En una entrevista con la revista Gente, Vicuña habló abiertamente sobre los desafíos que enfrenta Bautista durante su adolescencia, describiendo esta etapa como una "descompensación hormonal".
Vicuña explicó que la adolescencia de Bautista ha sido una etapa de grandes cambios y revelaciones. “Es una etapa en que adoleces muchas cosas, una etapa de revelaciones, es una etapa de descompensación hormonal, de que lo más lindo aparentemente para muchos es el descubrimiento del primer amor, también de tu vocación”, comentó el actor. Esta descripción refleja la complejidad de la adolescencia, un período en el que los jóvenes experimentan cambios físicos y emocionales significativos.
El actor también destacó la importancia del diálogo y el apoyo durante esta etapa. “Lo llevo bien, como un súper desafío de mi hijo mayor que me va exigiendo estar a la altura. Él trae códigos nuevos. Intento ante todo el diálogo, el diálogo con él, con su entorno, pero lo que destaco son sus responsabilidades con el colegio y su felicidad”, añadió Vicuña. Esta declaración subraya su compromiso de estar presente y apoyar a su hijo en todo momento, a pesar de las dificultades.
Bautista, quien recientemente participó en un intercambio estudiantil en Londres, ha mostrado ser un joven responsable y comprometido. “Ahora estuvo en un intercambio en Londres, súper bonito, estuvo un mes y medio. Son pequeños ejercicios que empezás a ver a tus hijos volar y eso es súper lindo. A Bauti lo veo hermoso, como un chico deportista, muy amigo de sus amigos”, expresó Vicuña. Este tipo de experiencias son fundamentales para el desarrollo personal y académico de los adolescentes, y Vicuña se muestra orgulloso de los logros de su hijo.
A pesar de los desafíos, Vicuña también reconoce las cualidades positivas de Bautista. “Es un pibe hermoso, tiene una lucidez, una nobleza, a mí me sirve y aprendo todos los días de él”, afirmó el actor. Esta relación de aprendizaje mutuo es esencial para fortalecer el vínculo entre padre e hijo, especialmente durante la adolescencia.
El actor también reflexionó sobre las similitudes y diferencias entre su propia adolescencia y la de Bautista. “En algunas cosas sí, creo que todos los adolescentes se parecen. Sin dudas es la etapa más difícil”, comentó Vicuña. Esta comparación permite a Vicuña empatizar con su hijo y comprender mejor los desafíos que enfrenta.
